El pasado 23 de septiembre de 2025, el Hotel Abba Euskalduna de Bilbao acogió la jornada “IA en seguridad corporativa: reinventando la vigilancia, anticipando el futuro”, organizada por SAE dentro de su Think Tank “Gure Txoko”. El encuentro reunió a profesionales del ámbito tecnológico y de la seguridad para reflexionar sobre cómo la Inteligencia Artificial (IA) está transformando el sector.
Los protagonistas de la jornada fueron David Ríos Morentin, Security Business Manager, y Jorge García Castaño, Director del Departamento de Analítica de Vídeo Inteligente, ambos pertenecientes al centro tecnológico Vicomtech, referente en investigación aplicada. Sus ponencias ofrecieron una visión completa: desde un marco general sobre el papel de la IA en la seguridad corporativa hasta ejemplos concretos de aplicaciones en videovigilancia y análisis de información visual.
La jornada se estructuró en dos partes. En la primera, de carácter más conceptual, David Ríos expuso la misión de Vicomtech como Centro Tecnológico que ofrece apoyo a empresas de seguridad con inquietudes en innovación. Subrayó que uno de los pasos clave a la hora de abordar proyectos de Inteligencia Artificial consiste en evaluar correctamente las necesidades de cada compañía y el estado del arte tecnológico disponible. Esa reflexión, explicó, permite decidir si conviene invertir en soluciones ya existentes o en desarrollos a medida.
Ríos insistió en que, pese a los avances, la última decisión en materia de seguridad debe recaer siempre en las personas. La IA, añadió, debe concebirse como una herramienta de apoyo al juicio humano, nunca como un sustituto. También abordó el marco regulatorio europeo, cuyo objetivo es identificar y controlar los riesgos derivados de la IA y dotar a estas tecnologías de transparencia y confiabilidad, condiciones imprescindibles para su implantación en entornos sensibles como la seguridad corporativa.
La segunda parte de la jornada corrió a cargo de Jorge García, que presentó varios casos de éxito en videoanalítica inteligente. Entre ellos, mostró aplicaciones capaces de interpretar escenarios complejos y comportamientos humanos, así como sistemas diseñados para el triaje de evidencias o la detección temprana de situaciones de riesgo. Uno de los aspectos más llamativos fue la capacidad de ciertos algoritmos para predecir comportamientos en concentraciones de personas, detectar objetos abandonados que puedan constituir una amenaza o incluso identificar individuos sin recurrir a la biometría, preservando así mejor la privacidad.
García también llamó la atención sobre un desafío crucial: la escasez de datos reales para entrenar los modelos de IA destinados a la seguridad. Esta limitación, señaló, dificulta el desarrollo de sistemas más robustos y exige combinar innovación técnica con marcos éticos y legales adecuados.
La jornada concluyó con un debate abierto en el que quedó patente que la Inteligencia Artificial se ha consolidado como un recurso estratégico para las empresas en materia de protección y vigilancia, pero que su implantación debe ir siempre acompañada de criterio humano, regulación clara y responsabilidad social.
Con eventos como este, SAE y su think tank “Gure Txoko” ponen sobre la mesa los retos y oportunidades que marcarán el futuro de la seguridad corporativa, un futuro en el que la tecnología y las personas deberán avanzar de la mano.